Madrid. Domingo 28 Febrero 2010 . 21:00h, Estadio Vicente Calderón.
Ayer vi a una banda de 22 jugadores sobre el maltrecho césped del Manzanares.
Dos equipos haciendo lo que mejor saben hacer durante esta temporada y algunas más, el ridículo, acompañados en tal sarao por un arbitro que arbitra peor que si dejáramos a un espantapájaros con un silbato. En tan dantesco paraje, el pare Marchena se erigió como protagonista absoluto de la noche, disfrazándose de villano y condenando a su equipo a la derrota, echando una mano al equipo colchonero en su viacrucis liguero.
De nada me sirven las excusas del desgaste físico contra el Brujas, porque para eso hay una plantilla, jugadores como Alejandro y Zigic tenían que ser de la partida, en detrimento de un Villa inoperante. Me desilusioné con la pareja Blade-Banega, el primero como Chuck Norris en desaparecido en combate, y el segundo perdiendo infinidad de balones y cometiendo dos penaltis en un partido para olvidar.
De nada me sirven las bajas en defensa, ante una defensa de risa como la del Atlético.
Tenemos lo que tenemos, un equipo conformista con la 3º plaza, que no será tal porque a este ritmo no entraremos ni en UEFA. Tenemos un equipo con gente como Albelda, Miguel, Del Horno (porque no está pero se le paga la ficha), la finta y el sprint, y jugadores retirados como Vicente y Baraja.
Y lo peor, tenemos un entrenador hipócrita y mentiroso, que crítica el juego del equipo, y al que acusa de no hacer "algo más" en ataque, aunque sea con 10; cuando es el mismo el que al minuto de la expulsión de Marchena, sustituye a Mata por el Kaiser Maduro, dando un mensaje a la plantilla de " a ver si hacemos algo en ataque con esta variación táctica".
Ayer era un día para sacar a gente de la cantera a jugar, a ver si sacamos un chaval del filial útil para la primera plantilla, dar un mensaje al club de que el primer equipo cuenta con sus categorías inferiores. Que mejor manera esta de solucionar problemas económicos y rentabilizar un producto que ya tienes y ponerlo en el mercado. Que mejor manera para un entrenador, de perpetuarse en la memoria colectiva del aficionado, sacando a un chaval de la cantera y poder convertirlo en estrella del equipo, o al menos en un jugador aprovechable para la entidad.
La semana que viene nos visita un equipo que pide a gritos una plaza de acceso a la 2ª división, a ver si al bueno de Unai se le ocurre resucitarlo, y convertir al niño de moda Canales en el nuevo Ginola.
Espeto a Emery a que haga como su homólogo Guardiola. Que en el vestuario alecciona a sus jugadores con música de fondo. Dicen los entendidos que la clave del éxito y buen juego del Barça no está en su política de fichajes, ni en el trato a la cantera, ni en el carácter de su "president", ni siquiera en las fiestas afterhour post-celebración en el luz de gas, ni en su "sentiment" de club; la clave reside en el estímulo que produce el single de "Viva la Vida", perteneciente al cuarto álbum de estudio de Coldplay, pero plagio evidente del single de Joe Satriani, "If I could fly", todo hay que decirlo.
Desde este humilde espacio recomiendo a Unai la escucha de temas de Pepe Marchena, gran cantaor flamenco , para que tenga en el recuerdo lo que no se debe hacer, dar el cante.
